Entre paredes llenas de telas, suelas, pegamento y
máquinas de coser zapatos, está el pequeño negocio de Jimmy Mora, quien sin
empleo se aventuró a fundar
su propio negocio.
Al no encontrar un empleo formal, su padre le
aconsejó coser zapatos con dos máquinas viejas que tenía en una bodeguita en el
patio de su casa, la idea le llamó la atención, pero no sabía dónde empezar a
realizar este trabajo.
Jimmy Mora siempre a madrugado. Cuando tenía empleo
formal se levantaba a las 5 de la mañana para alistarse, salir a la calle a
tomar un bus y llegar puntual a su centro de labores. Ahora lo hace porque se
levanta a colaborar con su esposa con los quehaceres del hogar. Tiene 2 hijos
varones uno de 10 años y el otro de 12 años, los dos asisten al colegio.
“Me levanto, luego despierto a los niños
mientras mi esposa hace el desayuno, preparo al niño más pequeño y ayudo a
ordenar los cuadernos a mi otro hijo mayor” dice Mora de 36 años de edad. Una
de las ventajas de su nuevo empleo es que le permite estar más cerca de su
familia y ayudar más a la crianza de sus hijos.
Su empleo anterior lo hacía regresar noche a su
casa, agotado, con ganas de comer y dormir nada más, ahora vendiendo materiales
para hacer zapatos, termina a las seis de la tarde y con más tiempo para sus
hijos.
Un día se
apareció lleno de grasa, pues le dio un buen retoque a las dos máquinas de
coser zapatos que su padre le había ofrecido, al principio le daba pena –confiesa-,
pero no se desanimó. Tiene a su familia y no podía seguir esperando que lo
llamaran de alguna empresa para emplearlo en alguna bodega, que era en lo que
tenía experiencia.
Su
trabajo consistía en cargar y descargar. El resultado de la fuerza
exagerada que hacía en el trabajo, le salió una hernia. Lo operaron y le
recomendaron evitar al máximo la carga. Esta fue la causa principal de su
despido. Un día uno de los guatemaltecos lo mandó a llamar y le dijo: “Así no
me servís, hasta aquí, ya no voy a ocupar más tus servicios”.
“Y me mandó
a descansar”, dice y sonríe con pena. Usa la palabra “descansar” como un
eufemismo y cuenta la anécdota sin rencor. Eso pasó hace casi 4 años. De
inmediato metió papeles en muchas oficinas y empresas. Nunca lo llamaron. Esos
seis meses sin trabajo fueron difíciles, asegura. A él nunca se le hubiera
ocurrido la idea de coser zapatos, pero entonces se planteó la pregunta ¿dónde
coser zapatos?. Moraga vive en el barrio de Monimbó, visitó el Mercado
Municipal y se fijó que ahí había varios puestos de cocedores de zapatos.
El lugar
ideal
Un domingo
su tía Mayra, llegó de visita, una señora de buen corazón y que siempre
lo ha apoyado; ella al escuchar que Moraga quería poner su negocio propio pero
no tenía local, sin dudarlo le ofreció aunque ella utilizaba para guardar
mercadería de ropa, puesto que ella tiene un tramo de ropa en el mercado de
Masaya.
A Moraga le
pareció un buen gesto de parte de su tía y llegó con sus dos máquinas a
instalarse en el local, muy contento, porque no había otro negocio de zapatos
más que el suyo. Y como si ese lugar esperara que algún negocio
floreciera, empezó a llegar clientela. Los zapateros necesitaban coser los
zapatos para ofrecerlos en el mercado a buen precio. Jimmy les hacía ese
trabajo por 10 córdobas, la calidad que ofrecía le permitió mantener su
clientela.
UN PASO MÁS
Hace
aproximadamente 2 años Mora pensó en surtir su negocio con los diferentes
materiales que se usan para hacer zapatos, con sus ganancias compraba un poco
de tela y suelas.
Un día se
encontró a buenos proveedores quienes le ofrecieron vender toda la materia
prima que se usa para la elaboración de los zapatos, al ver el número de
clientes que asistían a su negocio, y al escuchar lo caro que los comerciantes
le vendían la materia prima, Mora decidió aceptar la propuesta de los
proveedores y vender a sus clientes a precios más accesibles. “Soy una persona
que sabe lo que cuesta la vida por eso trato de ayudar a mis clientes al
ofrecerle lo que necesitan a un bajo precio”, afirma Mora.
Para que
conozcan la amplia variedad de materiales que ahora Mora ofrece en su
negocio:
Pega blanca
Pega
amarilla
Tela
deportiva
Te la de Eva
Charol
Serpiente
negra y café
Nuguet
Sellos
Entre otras
ELABORACIÓN DE ZAPATOS
El
corte: Constituye la parte externa del zapato, y está
formado por el empeine, la pala, el collarín, el chaleco, el antifaz y la
puntera.
El corte es
de plástico, de lona o de tela, es la parte del tenis que envuelve al pie.
En la parte
del talón entre el forro y el corte, el zapato lleva una pieza llamada
contrafuerte, que le da forma y lo refuerza; en la punta del zapato se coloca
un refuerzo llamado casquillo.
La planta: Es la parte del zapato que sirve de base para el montado del mismo
y es de cartón o material sintético, la planta está entre la suela y la
plantilla, en algunos zapatos lleva una costilla, que es una pieza de lámina
que sirve para dar firmeza y resistencia a esta parte.
La suela: Es la parte del zapato que está en contacto con el suelo y puede
ser de diferentes materiales como: cuero sintético, hule negro o de color,
suelas prefrabricadas, crepé, o P.V.C (policloruro de vinil); sobre la
suela la que descansa todo el peso del cuerpo.
Forro: El forro puede ser de piel, carnaza, tela, piel sintética u otros
materiales.
Plantilla: Es una pieza de piel natural, o piel sintética, plástico o hule
espuma, que lleva el zapato por la parte interior y es para que las costuras no
lastimen al pie; muchos fabricantes le ponen una etiqueta de tela con la marca
o nombre del producto.
Todos estos
productos Jimmy Mora los ofrece en su local donde antes solo ofrecía coser
zapatos ahora ofrece todos los productos para poder elaborarlos, a
precios favorables, cabe mencionar que este negocio ha generado más de 20
empleos a jóvenes que quieren ganar su dinero dignamente .
"Me
siento orgulloso de lo que he logrado, al principio fue un reto pues no sabía
si iba a poder ganar lo suficiente para comer, mi familia y yo, ahora miro los
frutos de mi esfuerzo. Lo mejor es saber que ayudo a otras personas que confían
en mí y saben que mis materiales son de buena calidad", dice mirando hacia
la puerta de su negocio prospero.
El negocio de Jimmy Mora se ha expandido en la ciudad de Masaya ahora
tiene 4 locales más, entre ellos uno ubicado dentro del Mercado municipal.